VOLVER

La danza Zaouli de Costa de Marfil, la magia del encanto de los espíritus.

Reconocido como patrimonio mundial de la UNESCO en 2017, El “Zaouli” es protegido por la convención para la protección del patrimonio cultural inmaterial de dicha organización. Se refiere a una danza y una música popular y propias al pueblo Gouro de los departamentos de Bouaflé y de Zuenoula en Costa de Marfil. La danza “Zaouli” es un homenaje a la belleza femenina que se inspira de dos diferentes máscaras que son el “blou” y el “djela”. Otra denominación de esta danza es « Djela lon Zaouli », lo que significa « Zaouli, la hija de Djela ». En un mismo espectáculo, el “Zaouli” asocia la escultura (a causa de la máscara), la tejeduría (en el traje), la música (la orquesta, la canción) y la danza. 

Los que detienen la máscara, y que tienen derecho a su práctica son los escultores, los artesanos, los instrumentistas, los cantantes, los bailarines y los ancianos. El último grupo mencionado son los vigilantes de las costumbres y tradiciones de la comunidad Gouro. Tiene el “Zaouli funciones educativas, por transmitir los valores humanos y culturales a los jóvenes. A estos, se les transmite las costumbres del pueblo Gouro mediante la danza. La canción, los tambores y la danza en sí misma, significan mucho porque transmiten casi todo de la realidad del pueblo.  

El “zaouli” también tiene funciones lúdicas y estéticas ya que tiene por cometido promover la belleza femenina. El lado estético del “Zaouli” se puede percibir en la forma de vestir de los bailadores. 

Otra función de esta danza es que contribuye también a la integración y la cohesión social. En los festivales en pueblo Gouro, así como lo mencionamos arriba, hay competición entre diferentes pueblos, es decir que se pueden reunir varios pueblos, cada cual con su bailador y se celebra la cultura. Eso establece buenas relaciones entre los pueblos y les permiten convivir.

Considerado portador de la identidad cultural de los que la detienen, el “Zaouli” es una danza cuya transmisión se hace durante representaciones musicales y sesiones de aprendizaje. Los principiantes ensayan bajo la supervisión de los más experimentados mientras que el importantísimo papel en el proceso de  la transmisión lo desempeña el consejo de ancianos y liderazgo, los que garantizan la tradición del pueblo. Cada pueblo Gouro tiene un bailarín de referencia y se organizan también festivales entre diferentes aldeas con el fin de promover más la cultura. 

Desde el inicio el bailador utiliza objetos similares a borlas para señalar el ritmo de los tambores. La danza, en sí misma es de pruebas y el bailarín por su manera de bailar reta de cierta forma a los espectadores. Debe demostrar su talento, su originalidad y su habilidad haciendo muchos pasos de danza que no deben coincidir los unos con los otros. Es decir que debe hacerlo todo para no repetir sus pasos.

Otra cosa es que según nos dicen los Gouro mismos, “llevar la máscara “Zaouli” tiene muchos efectos sobre el que lo lleva porque cambia, y los espíritus son los que lo dirigen y lo descartan por lo tanto de todo aquello que lo rodea. En cuanto lleve la máscara, ya no depende de sí mismo, no baila él, sino el espíritu que tiene posesión de él. 

Mientras baila es muy rápido, provoca mucho polvo y se debe seguir con los instrumentos de música, algo que también depende de los espíritus.

Te animas a visitar estos lugares mágicos en tu próximo viaje a Costa de Marfil ?